CORINA & PATRICIO

26 augusti 2018Lleida, Spanien

Y es que las bodas también pueden ser pequeñas y en una tarde de domingo y no por eso son menos importantes o menos emotivas. Al final, lo que sucede en un día de boda es un coctel de emociones que siempre sorprenden. La boda de Corina y Patricio, celebrada en el Palau de Margalef (Lleida), era una boda especial para mí, puesto que era mi primera boda con novios de rumanía y por tanto cambiaban ciertas costumbres habituales en las bodas de nuestro país. Por ejemplo, el novio va a casa de la novia a recogerla. Previo pago de un arancel simbólico, puede entrar en casa donde tiene que encontrar a la novia escondida entre los invitados y familiares. Otra costumbre sorprendente es el ritual de cambio de velo en la novia y de la corbata en el novio, que vendría a ser como la entrega de los novios en las bodas de aquí.

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